Poinsettia, un clasico de la navidad

Acebo, Muérdago, Abeto y Poinsettia. Cuatro vegetales  que todos asociamos con tiempos navideños. Hoy hablaremos de esta icónica planta, la Poinsettia.


La  Poinsettia pulcherrima  es una planta de la familia de las Euforbiaceas, esta especie en concreto es originaria de Mexico, donde ya se conocía en tiempos precolombinos usada para ofrendas a los dioses, fines medicinales...  Con la llegada de los Españoles, y el cristianismo, al nuevo mundo la planta fue transformada de ofrenda "pagana" en ofrenda a la Virgen. Y empezó a utilizarse como planta de ornato al tener este característico color rojo en Navidad, cuando en muchos lugares no había flores o demasiadas plantas verdes para decorar.
El nombre lo debe a un diplomático estadounidense aficionado a las plantas que visitó México, J. Roberts Poinsett. y fue el que envió a estados unidos varias de estas plantas que le maravillaron.

Es una planta que puede crecer hasta pasados los 4 metros de altura, generando ejemplares de gran volumen. En la actualidad se comercializa de diversas formas y tamaños. Como por ejemplo plantas de "pie alto", "mini", de colores rojo, blanco, rosa, amarillentas...para ofrecer un mayor abanico de posibilidades a los compradores.

Curiosamente lo que valoramos de la Flor de Pascua no son sus flores. Son brácteas, hojas modificadas que viran del verde al rojo y están dispuestas al rededor de la flor ,que son esos "botoncitos" amarillos en el centro de las brácteas.

En general son plantas populares y económicas, el problema es que en muchos casos el tratamiento poco delicado en los puntos de venta y su emplazamiento en nuestras casas puede comprometer la vida de dichos ejemplares.

En general la Poinsettia tolera bien distintos tipos de suelo. Eso sí, a condición que drenen bien ya que uno de los grandes problemas de sus cuidados son los excesos de humedad en las raíces y que nos pueden hacer fracasar en su cultivo.
Requiere abundante luz para prosperar, pero que el sol no incida directamente.
Aunque sea una planta de climas cálidos y no soporte bien el frío, tampoco es muy resistente a un exceso de calor y sequedad ambiental, cosa que en cualquier hogar  del hemisferio norte puede ser un problema en estas fechas.
Hablo de la Poinsetia como planta de interior, pero no olvidemos que si vivimos en un lugar con climas muy benignos y sin fríos invernales puede cultivarse en el jardín.
(Tampoco perdamos de vista su uso como "flor cortada" en centros y arreglos.

Todos los aficionados a la jardinería y las plantas pensarán en mantener la planta viva pasadas las navidades. En general una temperatura que ni sea muy fría ni pase de los 25ºC (cuidado con colocarla próxima a chimenea o radiadores), no pasarnos con los riegos manteniendo el sustrato húmedo pero nunca encharcado y que reciba bastante luz serían los consejos para lograr que pasen de enero.

Será entonces cuando se transplante a un contenedor mayor, el sustrato insisto debe drenar bien.
Para mantener el ejemplar compacto, se puede podar así se elimina la dominancia apical y las otras yemas producirán brotes y por tanto la planta tupa.  Atención al podar con su látex toxico no tocarse ojos ni boca y mejor si usamos guantes,no es cosa de tomarlo a la ligera. Es fácil cortar el sangrado con agua templada como en otras especies que producen esta sustancia.

 Si todo va bien con riegos, algún aporte de abono... la planta crecerá (no nos asustemos si tras la navidad pierde unas cuantas hojas). Pero para que florezca necesita que las horas de luz bajen, teniendo periodos de 12-14 h de oscuridad, mejor si se da de forma progresiva desde final de verano. (Es el proceso natural que se da en el hemisferio norte al llegar el otoño, si bien podemos "forzar" el proceso cubriendo la planta unas horas al día...
Sin este descenso de las horas de luz no habrá floración ni brácteas rojas para final de año...

Hay escritos en relación a los cuidados de esta planta mucho más detallados, para intentar que pase las navidades lo mejor posible, pues pese a los millones de plantas vendidas cada año, no son muchas las que sobreviven a las fiestas.

Desde luego es todo un clásico navideño, y en muchos lugares del planeta se decoran no solo las casas con esta planta si no que podemos verlas en restaurantes, tiendas, edificios públicos, incluso en los comercios, floristerías y supermercados donde las venden ayudan a darle un toque navideño.
A mí se me hace impensable una navidad sin flores de Pascua.

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