Parque Javier Cortes, Saldaña, Palencia

Esta semana os hablo de un parque en la provincia de Palencia. Situado en la localidad de Saldaña.

La Villa de Saldaña es, como decía, una población de la provincia de Palencia, que es la "capital" de la comarca de la Vega-Valdavia.  Una zona de transición entre las llanuras cerealistas y la montaña. Situada a 950 metros sobre el nivel del mar. Región con fértiles tierras de cultivo y bien regadas por el rio carrión y sus afluentes. Un lugar donde se alternan robledales, pinares de repoblacion, cereal, huerta, cultivos de legumionsas como las famosas alubias de Saldaña, el ganado ovino y bovino,las setas, la caza o las truchas y cangrejos...
Todo esto fue ya valorado desde tiempos remotos por diversos pueblos, asi lo atestigua su rica historia, sirva como ejemplo destacado la villa romana de La Olmeda situada a escasos kilómetros en Pedrosa de la Vega.
Este lugar, fue la casa señorial de un terrateniente romano, que aún hoy nos deja ver la lujosa vida de su propietario, como un gran "spa",las termas, de 900 metros cuadrados (mayor que otras villas romanas enteras) o la superficie del recinto con mosaicos unos 1500 metros cuadrados...

Esta villa romana, gran fuente de turistas/ingresos de Saldaña y de toda Palencia por extensión, vio la luz gracias a Javier Cortes. Fue quien en unos trabajos agrícolas en una finca de su propiedad descubrío el yacimiento arqueológico, y comenzó sufragando las excavaciones, guardando los objetos encontrados en su casa y posteriormente cediendo gratuitamente a la diputación provincial tamaño hallazgo para que pudiesen continuar su labor, conservar, mostar y explotar toda la riqueza que atesoraba la Olmeda.

Javier era agronomo, un hombre culto y generoso que adoraba Saldaña, incluso fué alcalde de la villa, y nombrado hijo predilecto de Saldaña... de ahí que la mayor superficie ajardinada del municipio lleve su nombre.

El parque Javier Cortes está emplazado en la margen derecha del río carrión, en un soto de dicho río.
Lo primero que llama la atención al visitante es su cerramiento, una grán valla de ladrillo y reja, que fue desmontada por tramos y vuelta a montar en el parque, por cierto emplazada primero en una finca del propio Javier Cortes y cedida a tal efecto al municipio, otro ejemplo más de su altruismo.

No es un parque con muchos años de vida, comenzando su construcción a mediados de los ochenta del siglo pasado.
La primera fase de este jardín de unas tres hectáreas de superficie, fue diseñada como parque paisajista aprovechando el bosque de ribera existente y añadiendo diversas instalaciones como parque infantil, una plazoleta para todo tipo de eventos, pérgolas, bolera, plantación de gran diversidad de especies vegetales, un estanque  con diversas especies de aves acúaticas, pajareras...

Esta primera zona próxima a la valla de reja, su entrada "principal" es la más ajardinada, cuanto más nos alejamos comenzamos a internarnos en el propio bosque de ribera, atravesamos puentecillos que salvan los diversos cursos de cauce del río en dicho soto llegando a una zona más "salvaje" o mejor dicho menos intervenida desde el puto de vista jardinero, donde la profunda sombra apenas permite el crecimiento del cesped bajo el dosel arbóreo.
 El aspecto de parque de estilo paisajista se rompe en algunas zonas como esta gran explanada:

Botánicamente como comento podemos encontrar especies propias de un bosque de ribera como grandes alisos, chopos, sauces, incluso es fácil ver en primavera la parasita Lathraea clandestina floreciendo en las raices de los alisos.  Por otro lado madroños, alcornoques, tejos, sequoias, abedules,arces, acacacias, ailantos, olivos, catalpas, budleias, cotoneaster, rosales, diversos abetos... completan el abanico vegetal del lugar.

Bosque de ribera

Esta dualidad de bosque de ribera jardín permite que podamos observar en el parque gran cantidad de especies de animales como multitud de aves, ardillas, incluso se de buena tinta de avistamientos de nutría en el propio parque. Así como los  patos, gallinas, pavos reales... que se crían en dicho entorno.

El parque conecta también con el camping del municipio y con la zona del campo de futbol, piscinas, aréa de aparcamiento para caravanas...

Como Saldañes que soy, percibo que el parque ha pasado por épocas mejores, a día de hoy en algunos puntos la excesiva sombra (tal vez demasiados árboles) impide el buen crecimiento del cesped, en otras zonas los parterres no lucen como antaño y las areas de pradera estan invadidas por rebrotes de Populus alba, o del bambú, pintadas en distintas construcciones... supongo que la gran extensión del parque, los tiempos de crisis para las corporaciones municipales y la falta de tiempo para su correcto mantenimiento no ayuden, esperemos que vuelvan tiempos mejores para este lugar... Pero pese a todo es un lugar por el que merece darse un paseo, pues junto a la villa romana o la plaza vieja del municipio, el parque es uno de los simbolos de Saldaña.

Un  saludo y hasta el próximo martes.

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